miércoles, 5 de febrero de 2014

Trabajando sus miedos..Parte 2

Buenos días perrunos!!

Ayer nos escribió Silvia, comentando que a su border collie le pasa igual que a Hiro, que ladra y se lanza a los perros, en este caso sobretodo a perros más grandes que él. Su perro tiene 9 meses, casi la misma edad que tenía Hiro cuando le mordieron y empezó todo...


Lo que hoy explicaré no es ni mucho menos la solución a nada....simplemente contaré mi experiencia, cómo he ido trabajando con Hiro, qué me ha funcionado mejor y qué peor, para así poder ayudar un poco con nuestro caso. 

Hiro a los 8-9 meses le mordió un perro macho más grande que él...ese día se escondía del perro (una buena forma de llevar el miedo...y digo buena por que prefiero que se refugie en mi a que ladre y se ponga histérico)...pero como vio que no le servía de nada esconderse...decidió empezar a ladrar a los machos...

Es una conducta que se ha reforzado, en parte por mi culpa, ya que si cada vez que Hiro ladra a un perro lo coges y te vas....Hiro sale ganando...él lo que quiere es que el perro macho se vaya...que lo que le da miedo desaparezca....de ese modo, sin quererlo ni beberlo esa conducta se fue reforzando. 

Consulté diferentes adiestradores..cada uno daba su opinión y su manera de hacer....al final lo que me está sirviendo en realidad es un poco de cada consejo....

Hay una cosa que si que recomiendo mucho y que realmente va MUY BIEN.....hay que pasear en paralelo con otros perros, y sobretodo con aquellos que les dan miedo o les incitan a ladrar. Primero, paseos en paralelo pero a bastante distancia el uno del otro....Si que es verdad que al principio costará que se centre en el paseo y estará pendiente de ladrar todo el rato....pero corrigiéndolo y premiando cuando lo hace bien, el perro entenderá que tiene que estar pendiente del paseo e ignorar al otro perro.

Poco a poco estos paseos en paralelo serán más próximos...el perro tiene que entender que en el paseo estáis tu y él y sí que puede saludar a otros perros, pero no lanzarse al cuello. El hecho de pasear juntos hará que se acostumbre a la presencia de aquello que le daba miedo (habituación), se habituará al olor del perro, verá que el otro perro también pasea tranquilo, y poco a poco la convivencia mejorará. 


Otra cosa que recomiendo y que es muy importante es trabajar siempre con perros que sean tranquilos y equilibrados, que no respondan al gruñido del otro perro, ya que sino ambos se reforzarán esta conducta ladrando y no conseguiremos avanzar. Un perro tranquilo y equilibrado es la pareja perfecta para trabajar estos temas de agresividad y miedo.


Otro truquito que a veces funciona es la llamada....es decir...cuando ya ves a un objetivo fácil para tu perro, que sabes que le va a ladrar, hay que anticiparse y llamarlo....con la llamada (una llamada suave y a modo de juego) y los premios, trabajamos que nos preste más atención a nosotros que al otro perro y de este modo deje de darle tanta importancia a ese objetivo y que lo importante seamos nosotros, nuestro vínculo.

También he probado el HALTY....sí que va bien en ocasiones...pero yo al final con Hiro lo utilizo más como castigo (casi a modo de bozal) que como herramienta...ya que con Hiro por ejemplo, el halty si que hace que esté muy sumiso, no que no ladre tanto...pero en cuanto se lo quitas ladra a todos....toda la tensión y ganas de ladrar que ha contenido llevando el halty...las ha sacado luego....Así que lo utilizo más como castigo....si ladra a un perro, y ni con la llamada, ni paseando a mi lado ni nada funciona...toca Halty. Hiro empieza a saber que si le digo "morrió" (bozal en  catalán) significará que le pondré el Halty y ya se lo piensa dos veces antes de ladrar...en cuanto se frena y me mira, le premio, ya que realmente es lo que quiero.


Otra recomendación...no tenséis la correa cuando veáis a otro perro objetivo...tengo comprobado, que después de trabajar la llamada y los paseos en paralelo, si le dejo la correa suelta a Hiro cuando ve a un macho, se acerca, lo huele, y si no le gusta le gruñe (es una señal que Hiro da para que entiendan que no quiere que se le acerquen por que tiene miedo), y se va sin ladrar ni lanzarse al cuello. Hiro nota que no tiene nada que le sujete y le mantenga ahí, nota que puede tener una vía de la escapatoria, y por eso ya se acerca con precaución, huele y se va. (eso si, después de trabajar mucho..por que al principio era imposible que se acercase a oler un macho...primero hay que sentar la base de trabajo con otros perros, y en cuanto coja confianza ya se le puede dar ese voto de confianza para acercarse voluntariamente a oler sin que pase nada.)



Me he enrollado mucho y no se si ha quedado claro del todo...no hay una formula mágica para tratar estos casos, cada perro es un mundo y tienes que ir descubriendo que es lo que te funciona a ti con tu perro. Al final terminarás viendo la postura de tu perro, ya sabrás que es lo que va a hacer y podrás anticiparte para evitar los problemas. Es vital que conozcas a tu perro, sepas leer su expresión corporal, sus señales de calma, para poder trabajar con él y ayudarle.

Espero que os haya servido mi experiencia. Aún seguimos trabajando con Hiro, pero después de dos años, ha mejorado muchísimo!

Besotes perrunos!


1 comentario:

  1. Os cuento un poco mi vivencia con Hiro. A Hiro lo mordieron de pequeño, un perro macho con bastante carácter (además lo engancho dos veces, y una de ellas le hizo un agujero cerca de la boca). Desde entonces, Hiro ha aprendido que la única forma en que el resto de perros machos se van es ladrando y gruñendo, antes de que le puedan hacer nada.

    He recurrido a varios adiestradores también y la verdad es que la teoría es muy bonita, pero en la práctica, nada fácil. Lo que yo al final he ido haciendo y es lo que poco a poco me va funcionando es lo siguiente:

    Llevar siempre premios encima.
    Al principio evitar que se le acerquen mucho (y no solo perros macho, sino perros en general, por que si no, asociará que estás trabajando cuando llega un macho y no será muy efectivo). De este modo, siempre que veo un perro, intento ver si es macho o hembra (si hija, al final ya de lejos los acabas reconociendo, e incluso cuando vas sin perro te fijas también jeje), si es hembra, reclamo la atención de Hiro, le hago sentarse o ir en junto, le premio si lo hace bien, y luego dejo que se acerque a saludar a la perrita. Si es macho, hago lo mismo y me alejo mientras me presta atención.

    Esto es al principio, para que el perro se acostumbre a estar pendiente de ti siempre que se lo pidas, y es por eso que evitamos al principio que se encuentre de cerca con algún macho.

    Después poco a poco lo que voy haciendo es andar detrás de perros macho (detrás un poco lejos), por que así los va oliendo, le reclamo atención y si me hace caso premio, y asi poco a poco va viendo que no pasa nada por que haya un perro macho delante.

    Lo que también va muy bien, es encontrar algún amigo que tenga perro macho, y pasear en paralelo. Primero con bastante distancia, y seguro que al principio le gruñe, pero reclamas su atención (en eso me refiero a llamarlo e ir premiando si te mira), y poco a poco verás que va concentrado en andar y no hará ni caso al perro macho. Esto lo hago por lo mismo, para que vea que no pasa nada andar cerca de un perro macho.

    Eso si, lo ideal en estas situaciones es trabajar con perros machos equilibrados que no respondan al gruñido del resto de perros, por que si el otro también planta cara, no podremos trabajar.

    Y con el tiempo, ahora ya cuando veo un perro llamo a Hiro, me mira, el perro cruza cerca y Hiro me sigue mirando y ya premio. Al principio casi le pegaba el premio en el hocico para mostrarle: "eh hiro tengo xuxes, mírame a mi". Y ahora no se lo pongo tan evidente, lo tengo en la mano, sabe que lo tengo y luego al final le premio.

    El día que no lleves premios, yo evitaría cruzarme ara a cara con perros macho. Lo ideal es que te cojas una riñonera de premios (en las tiendas las venden) y siempre que vayas de paseo te la pongas. Yo como premios llevo o Natural Menu (que es pienso pero muy sabroso), o pienso normal. De vez en cuando mezclo con algún premio muy sabroso para ir alternando. Yo normalmente llevo ya su cena de paseo, por que sino estaría como una vaquita!

    También siempre llevo en al riñonera una pelotita de estas que hacen ruido, que le chiflana Hiro, por si se ofusca mucho con algún perro, hacerla sonar y así lo despisto y no se centra tanto en el perro. Verás que al principio seguramente se ofusca mucho y por mucho que lo llames seguirá ladrando y gruñendo. Yo en esas situaciones cojo y me voy, por que cuando ya está así el perro poco puedes hacer. Siempre hay que intentar anticiparse al perro para que pueda ir bien.

    Como ves, salir a pasear con Hiro, es un trabajo continuo, nosotros siempre que paseamos trabajamos, pero eso también nos ha unido mucho más. Te recomiendo también que antes de salir de paseo, trabajes un poco en casa con él, algo de habilidades o juegos de olfato, así no sale con tanta energía a la calle y será más fácil trabajar los dos juntos.

    ResponderEliminar